JE504
Vendido
Estos atrevidos y modernos aretes de calavera tallados a mano cuentan con piezas centrales de diamantes alternativos de circonita cúbica y respaldos de plata de ley.
La calavera en el budismo se reconoce a menudo como un símbolo de impermanencia. Estos aretes son una forma asombrosa de reflexionar sobre la impermanencia y son un poderoso recordatorio de estar aquí ahora y vivir el momento presente; porque nada es permanente, todo es posible.
Los pendientes miden aproximadamente 3/8 de pulgada. Hecho a mano en Nepal.